En un mundo dominado por las redes sociales y el consumo digital, la figura del influencer ha evolucionado de celebridad esporádica a voz constante dentro del ecosistema informativo y cultural. El 2025 ha traído consigo una nueva generación de creadores de contenido que no solo acumulan millones de seguidores, sino que representan identidades, territorios y formas de ver el mundo que habían permanecido al margen de los reflectores tradicionales.
Esta nota se centra en cuatro perfiles emergentes que están redefiniendo el concepto de influencia: Lupita Villalobos y El Malilla desde México, Flavia Laos desde Perú, y Jools Lebron desde Estados Unidos. Cada uno, desde su trinchera, conecta con millones de personas no por seguir una fórmula, sino por desafiarla.
Flavia Laos: de actriz local a estrella internacional

Flavia Laos nació en Lima, Perú, en 1997. Aunque su rostro es conocido en su país desde hace años gracias a su participación en producciones televisivas como “Ven, baila, quinceañera” y “Princesas”, su transición a figura digital se dio con una estrategia clara: diversificar su presencia sin perder autenticidad.
En 2025, Flavia firmó con Hybe, la discográfica surcoreana responsable de BTS y NewJeans, convirtiéndose en la primera figura latina en su plantilla de talentos. Este salto marca no solo un hito en su carrera, sino en la representación latinoamericana dentro de un mercado global altamente competitivo.
Flavia combina contenido de moda, estilo de vida, música y reflexiones personales. En Instagram supera los 5 millones de seguidores, mientras que en TikTok mantiene una audiencia activa que la sigue tanto por su estilo como por sus lanzamientos musicales. Representa una nueva forma de influir: menos escandalosa, más profesional y con un claro enfoque en la construcción de marca personal.
Lupita Villalobos: la autenticidad hecha contenido

Lupita Villalobos es, ante todo, una voz sin filtro. Originaria de Hermosillo, Sonora, su ascenso en redes se dio de forma espontánea, con un video viral donde contaba una anécdota personal relacionada con una infidelidad. Lo que pudo haber quedado como un momento anecdótico se transformó en una carrera de contenido basada en la autenticidad, el humor y la crítica social desde la experiencia femenina.
Su pódcast “Las Alucines”, que co-conduce junto a Kass Quezada, se ha posicionado como uno de los más escuchados en México, convirtiéndolas en referentes de una generación que exige narrativas más honestas y menos maquilladas. En enero de este año, ambas fueron reconocidas en los TikTok Awards como generadoras de contenido y tendencia del año, consolidando su impacto más allá del formato.
Lupita cuenta con más de 3.5 millones de seguidores en TikTok y más de 1.2 millones en Instagram, donde comparte desde anécdotas hasta críticas sociales con un tono frontal que no intenta complacer, sino confrontar. Su estilo fresco, sin pretensiones, ha generado una comunidad leal y profundamente identificada.
El Malilla: reguetón desde el asfalto
Fernando, conocido como El Malilla, es la cara del reguetón del barrio mexicano. Proveniente de Valle de Chalco, Estado de México, su estética y propuesta musical están cargadas de referencias callejeras, romanticismo urbano y una identidad marcada por la jerga popular. En un género muchas veces monopolizado por voces del Caribe, El Malilla ha logrado abrirse paso con una propuesta 100% local.

El 2024 marcó su consolidación con presentaciones en escenarios internacionales, incluido el festival de Coachella en 2025, donde representó a la nueva ola de artistas mexicanos que están fusionando el reguetón con sonidos nacionales y letras cotidianas. Sus canciones no solo se escuchan; se viven.
En redes sociales, El Malilla acumula más de 4 millones de seguidores en Instagram y una base activa en TikTok donde sus videos musicales y clips callejeros superan constantemente el millón de reproducciones. Ha anunciado colaboraciones con artistas como Lola Índigo y Kaydy Cain, lo que apunta a una proyección continental que va más allá del nicho mexicano.
Jools Lebron: ironía, identidad y visibilidad
Jools Lebron explotó en redes sociales en agosto de 2024 con un video titulado “How to be Demure at Work”, donde combinaba ironía, humor seco y críticas sutiles a la cultura corporativa estadounidense. La frase “very demure, very mindful” se viralizó de tal manera que fue replicada por celebridades y marcas globales. Pero su impacto no se detuvo en una tendencia.

Jools es una mujer trans de ascendencia puertorriqueña, y ha convertido su plataforma en un espacio para hablar de identidad, representación y derechos LGTBQ+ con una mezcla de agudeza y ternura que ha encantado a millones. Su contenido navega entre la comedia, el comentario social y la crónica personal, posicionándola como una de las voces más originales del panorama digital en Estados Unidos.
Actualmente tiene 1.1 millones de seguidores en TikTok y más de 600 mil en Instagram, aunque su influencia se multiplica gracias a sus apariciones en medios tradicionales como “Jimmy Kimmel Live!” y colaboraciones con marcas de moda, belleza y plataformas inclusivas.
Nuevas narrativas para nuevas audiencias
Lo que une a estos cuatro perfiles no es el formato ni la temática de su contenido, sino su capacidad para conectar con comunidades que buscan representación, autenticidad y originalidad. Ya sea desde la banqueta, el escenario o el set de grabación, cada uno ha construido una identidad propia que trasciende el algoritmo.
En un 2025 marcado por la saturación de contenido superficial y tendencias efímeras, estas voces emergentes no solo captan la atención: la transforman.